Un mensaje publicado por Mendoza en redes sociales horas antes de su muerte generó preocupación. “No creo llegar a pasar las fiestas, si ofendí a alguien pido disculpas, y si alguien se lo merece que Dios lo perdone”, escribió. Este texto, sumado a las circunstancias del hecho, refuerza la hipótesis de un suicidio, aunque la Policía de Corrientes y la Fiscalía continúan investigando para esclarecer lo ocurrido.

Mientras tanto, la búsqueda de Loan se intensifica con una nueva etapa de rastrillajes en el paraje El Algarrobal, autorizada por la jueza federal de Goya Cristina Pozzer Penzo. Los operativos estarán centrados en cuatro espejos de agua, donde se cree que podrían haber pistas clave. Entre las medidas adoptadas se incluye el drenaje de una laguna, en un intento por avanzar con la principal hipótesis: la posible vinculación de la desaparición con una red de trata de personas.

A pesar de que ya se han revisado más de 20.000 hectáreas sin encontrar rastros contundentes, los investigadores siguen considerando que el niño podría haber sido sustraído y trasladado fuera de la zona. Este caso, lleno de incertidumbre y dolor, sigue movilizando tanto a las autoridades como a la comunidad, que clama por respuestas y justicia.