Con su fuerza, ganas y vitalidad, "Roxi" conto: “Junto a Alfredo mi marido atendemos y recibimos en la asociación a personas no vidente, con discapacidad visual, atendemos todas las discapacidades tenemos ingreso de gente en estado de postración, que no son ciegos, tenemos gentes con retraso madurativo, y muchas personas con discapacidad visual y discapacidad motriz”.

Para poder subsistir y salir adelante ellos venden plantas, huevos, bolsas para residuos, animan fiestas, hacen música. Pero la buena noticia es que ahora les donaron dos terrenos, que están ubicados en el barrio Molina Punta de la ciudad.

Allí se construirá el primer hogar del país destinado a atender y albergar a personas con discapacidad visual y no visual en situación de vulnerabilidad. En el otro se realizará una cancha para futbol adaptado a personas no videntes.

Roxana, una luchadora incansable que no la frena su discapacidad visual, contó que están felices por la donación de los terrenos, que fue realizado por un hombre que prefirió mantener su identidad en el anonimato, al respecto la mujer refirió: “Tenemos que hacer el cerramiento del hogar y queremos que nos alcancen los materiales y todo lo que se necesita para lograrlo, porque todo los que nos hacen en el lugar es ad honorem. Los albañiles nos hicieron precio y ahora vendemos los productos como ser huevos, pan rallado, bolsas de residuos, para juntar dinero para comprar los materiales para cerrar el terreno. Pedimos a la comunidad que difundan nuestro Facebook que es Rossana Emilia y si nos hacen la solicitud se ven todas las cosas que hacemos y nos pueden colaborar”, pidió Roxana.

“Desde hace 24 años que estoy en la Asociación fotos del alma. A veces estoy cansada, pero no estoy sola, hay mucha gente colaborando en esta asociación. Yo todo lo tengo anotado en mi mente. Soy poco frecuente con la tecnología. Sin embargo, ahora todos los no videntes hacen sus trámites con la computadora o el celular. Yo no me acostumbro, mi marido que es vidente me ayuda en todo. No sé qué hubiera echo si hubiera tenido un marido no vidente, Alfredo me ayuda en todo, con mi condición”, remarco al hacer referencia al rol importante que cumple su pareja para avanzar con la Asociación y dar ayuda, amor y contención.

Además de las atenciones médicas, a las personas que viven con ellos en su humilde vivienda ubicada cerca del Anfiteatro Cocomarola en la capital correntina.

La Asociación fotos del alma se caracteriza por ser muy libre, las personas que la integran se olvidan de los prejuicios y de su discapacidad. Ellos son ruideros, muy alegres.

“Yo los hago así, que sean libres, los hago hablar fuerte, los hago luchar por lo que quieren, mirenme a mí con 58 años como estoy a full. Ese hogar que vamos a construir en los terrenos que nos donaron no es para mí, ni para Alfredo, yo tengo mi casa heredada de mis padres. Pero ese hogar tiene una cláusula que dice por cien años y está destinado a personas no vidente o con alguna discapacidad que estén en estado de vulnerabilidad social”, conto Roxana.

Los integrantes de Fotos del Alma cantan, bailan, pasan por todos los ritmos, animan fiestas, Roxi es una animadora de fiestas, tiene una energía hermosa y contagiosa. “Contamos con cantantes muy buenos, que hacen distintos ritmos, vamos a animar fiestas de todo tipo, también vendemos huevos, abono, plantines, llevamos todo a domicilio”, remarcó.

Al mismo tiempo, Rossana Jokmanovich, afirmó: “ahora estamos haciendo una rifa y otras actividades para juntar plata para cerrar el terreno”. Para poder colaborar con la Asociación Foto del Alma se pueden comunicar al teléfono celular 3794717984.

Pero lo más importante a destacares que en Corrientes avanza la construcción del primer hogar para personas con discapacidad visual y otros tipos de discapacidad, en situación vulnerable del pais.

Para cerrar Roxana dio un mensaje a las personas que están atravesando por una discapacidad visual y no visual, y refirió: “Hay que asumir la discapacidad, nosotros trabajamos con la familia para ayudar a transitar el duelo. Porque hay que hacer el duelo y atravesarlo y arrancar de cero. Hay que sacar al discapacitado a fuera, para que se lo vea y lo conozcan. Los que nacemos ciego somos como nos hicieron ver el mundo. Pero hay ciegos del alma. Hay que hacer gimnasia de empatía, ponerse en el corazón de la gente que atraviesa una discapacidad”.