El gobernador de la provincia el pasado miércoles 13 de diciembre en una improvisada rueda de prensa estuvo a punto de admitir que aplicará cambios en su gabinete, pero se frenó y metió un amague ante los cronistas radiales que habitualmente le ponen celulares delante para que hable.

El mandatario sostuvo en aquella ocasión: “Nombrar funcionarios que dejaron lugares: por ejemplo en Asuntos Municipales. Todavía no evalué nombres”, dijo para despistar sobre la cobertura de cargos que quedaron vacantes porque sus antiguos ocupantes fueron electos legisladores provinciales o concejales en la ciudad de Corrientes y en el interior provincial.

Pero no respondió puntualmente la consulta sobre los cambios en ministerios. Justicia y Derechos Humanos es uno de ellos donde toda esta semana se rumoreó la llegada de un joven radical sub 40 con militancia en Curuzú Cuatiá.

También que en el Instituto de Previsión Social (IPS) podría arribar otra joven abogada ex concejal capitalina por dos mandatos consecutivos.

En ambos casos se trata de dirigentes radicales pero nada está confirmado. Como tampoco se sabe por qué el gobernador quiere aplicar estos cambios.

Sobre lo que aún no se refirió el mandatario provincial es si hará ajuste dentro del Gobierno provincial: cerrar direcciones, secretarías, direcciones. Dejar de usar aviones y automóviles del Estado provincial como ya anunciaron que harán sus pares de Juntos por el Cambio (JxC). Una forma de mostrar a la ciudadanía que el ajuste llega a todos lados, incluso al núcleo duro del poder.